Mitos más comunes sobre los gatos

Así como los gatos no tienen 7 vidas y es falso qué sean enemigos naturales de los perros, te platico otros mitos y realidades de los gatos. 

Los gatos negros traen mala suerte.

Durante la Edad Media, algunas personas creían que los gatos negros eran brujas transformadas en animales y que encontrarse con ellos en la calle era señal de mala suerte.

El color negro se produce de forma natural en gatos (así como los perros), esta es una característica genética y no tiene nada que ver con en el comportamiento del animal.

Las mujeres embarazadas deben deshacerse de su gato para no contagiarse de toxoplasmosis.

Los gatos se infectan con este organismo cuando cazan y comen presas infectadas. Si es la primera vez que entran en contacto con este organismo, los gatos excretan quistes de Toxoplasma en las heces por un corto tiempo, y es cuando las personas se pueden infectar si ingieren por alguna razón esas heces infectadas.  A pesar de la mala fama que tienen los gatos con el Toxoplasma, es mucho más probable que las personas se infecten con este organismo consumiendo carne de cerdo mal cocinada que de un gato. 

Es importante limpiar la caja de arena todos los días para no darle tiempo a que los quistes se vuelvan infecciosos; si estás embarazada, usar guantes o que alguien más limpie la caja. Pero es poco probable si vives en la ciudad que esto suceda y por favor no dejes a tu gato. 

Los gatos son animales traicioneros.

Son animales solitarios, pero eso no quiere decir que no establezcan vínculos de apego con otros animales o con su familia humana y por lo tanto es que muestren afecto de una manera distinta a la otros animales. 

También es importante tener en cuenta que los gatos tienen personalidades diferentes. Es decir, así como algunos pueden ser cariñosos, otros pueden ser más esquivos. Pero nunca son traicioneros, simplemente no los comprendemos correctamente cuando presentan ciertos sucesos y por el contrario hay cientos de historias de los Gatos, salvan, protejan o ayudan a sus humanos y otros animales cuando se encuentran en peligro arriesgando su propia vida. 

Por lo contrario el tener un gato tiene muchos beneficios tales como:

Reducen el estrés.

Acariciar gatos reduce los niveles de cortisol (hormona relacionada con el estrés). También el contacto físico con gatos incrementa en humanos la producción de ondas beta cerebrales, que habitualmente se producen en estados de relajación y calma profunda.

Tienen efectos terapéuticos en personas con autismo. 

El contacto físico con las mascotas incrementa los niveles de oxitocina, una hormona que está vinculada con el establecimiento de relaciones sociales. Varios estudios han encontrado niveles menores de oxitocina en sangre en niños autistas. Se ha comprobado que el incremento de niveles de oxitocina en autistas disminuye las conductas repetitivas y mejora la habilidad de evaluar el significado emotivo de la entonación al hablar. Por otra parte, otro estudio reveló que los niños con autismo que tenían mascota se sentían más tranquilos y se relacionaban con mayor facilidad.

Inspiran emociones positivas.

Un estudio indicó que ver vídeos o fotografías de gatos genera un incremento en las emociones positivas (felicidad, esperanza, sonrisas…) de la persona que los visualiza, así como un aumento de sus niveles de energía. Y al contacto con ellos estás emociones positivas se incrementaron aún más. 

Mejora la salud mental. 

A  personas que padecían una patología psicológica (enfermedad mental) se les dio un Gato como mascota a cuidar,  y el estudio reveló que el 87% de los pacientes al tener un Gato tenían un impacto positivo en su vida y el 75% sobrellevaba mejor el día a día gracias a la compañía de su gato.

Ronroneo.

Esta vibración sonora que producen los gatos domésticos, está en una frecuencia de 20-50 Hz, estimula la curación de tejidos especialmente a lesiones que afectan tendones y músculos, incrementa la densidad ósea y disminuye el dolor. 

Mejora la salud en general.

Debido a todo lo anterior y si actualmente no tienes gato y estás planteando dejar entrar uno en tu vida, has de saber que durante el primer mes tras la adquisición de una mascota (perro o gato), las personas mejoran sus puntuaciones en sus estudios de salud general, comparado con las personas que no tienen mascota. 

En las personas con mascota hubo una reducción significativa en la incidencia de problemas de salud menores durante este periodo. Así que… ¿Qué estás esperando?

Por una cultura y cuidado animal.

Juntos Podemos Más.

@rostarpets