Toyota nos muestra su prototipo de Hilux en versión eléctrica de celdas de combustible basadas en hidrógeno (FCEV), con lo que deja claro su compromiso con la estrategia de electrificación para lograr una movilidad libre de carbono.
La marca japonesa ha alcanzado este gran logro aplicando diferentes tecnologías como la híbrida eléctrica (HEV), híbrida eléctrica conectable (PHEV), eléctrica de celdas de combustible basadas en hidrógeno (FCEV) y los 100% de batería eléctrica (BEV), lo que le permitirá a futuro adaptarse a las diferentes necesidades de los clientes y sobre todo a los entornos operativos en todo el mundo.
Un proyecto con grandes aliados
La presentación de “La Indestructible” eléctrica se dio en las instalaciones de Toyota Manufacturing UK en Derby, Inglaterra, justo donde se ha desarrollado el proyecto para el que tuvo varios aliados –Ricardo, ETL, D2H Advanced Technologies, Thatcham Research y el apoyo adicional de Toyota Motor Corporation (TMC)– y el respaldo financiero del Gobierno del Reino Unido. Hilux es un ícono global de la marca Toyota con una reputación de durabilidad y confiabilidad excepcionales. El proyecto ha explorado cómo se podrían mantener estas cualidades al adoptar un nuevo tren motriz eléctrico de celdas de combustible basadas en hidrógeno (FCEV) de Cero Emisiones.
Los elementos clave de la Hilux eléctrica
Para el desarrollo del nuevo tren motriz se emplearon elementos clave del sedán de celdas de combustible de hidrógeno (FCEV): Toyota Mirai. Recordemos que las celdas de combustible no producen emisiones de escape, únicamente generan agua pura.
El hidrógeno se almacena en tres tanques de combustible a alta presión, lo que le da al prototipo de Hilux, un rango de autonomía de más de 600 km, significativamente más de lo que se podría lograr con un sistema 100% de batería eléctrica.
La batería híbrida que almacena la electricidad producida por las celdas de combustible basadas en hidrógeno, mientras se conduce, se encuentra ubicada en la batea, evitando con ello la pérdida de espacio en la cabina.
Así comenzó el proyecto
El proyecto comenzó a principios de 2022 y la construcción del prototipo comenzó el 5 de junio de este año, siguiendo los principios del Sistema de Producción Toyota en un área dedicada dentro de las instalaciones de TMUK. El primer vehículo, de los 10 que se desarrollarían para finales de este año, se completó tan solo tres semanas después. Estos se someterán a pruebas rigurosas para garantizar que la seguridad, rendimiento dinámico, funcionalidad y durabilidad cumplan con los altos estándares requeridos en un modelo de producción. Ahora se encuentra en la fase de evaluación que permitirá decidir sobre un posible modelo de producción en la segunda mitad de esta década.