Si bien generó cierta división entre los fanáticos, Rogue One es una de las historias de Star Wars más interesantes que se han contado en mucho tiempo. No tendríamos Andor sin Rogue One, ya sea que hablemos de la narrativa o del tono mucho más oscuro. Rogue One también fue una de las películas más caras jamás realizadas, con un costo de entre 200 y 265 millones de dólares. Logró recaudar 1.058 millones de dólares.
A pesar de que el público en general conoce parte del proceso de producción, también hay toneladas de imprecisiones sobre lo que sucedió exactamente en línea. Hubo muchas regrabaciones y reescrituras, pero tal vez no al nivel que la gente supone. Algunos han dicho que cuando Lucasfilm contrató a Tony Gilroy en 2016, esencialmente asumió el cargo de director a pesar de no estar acreditado como tal.
El director de la película, Gareth Edwards, habló recientemente para disipar cierta información errónea sobre la película: “Las cosas que hay en Internet sobre lo que sucedió en esa película son muy inexactas, Tony Gilroy entró e hizo un gran trabajo, sin duda. Pero todos trabajamos juntos hasta el último minuto de esa película… Lo último que filmamos en el rodaje fue la escena del corredor de Darth Vader. Yo hice todas esas cosas”.
Edwards también insistió en que está “orgulloso de la película que todos hicimos”. Su nueva película, The Creator, ya se proyecta en los cines.
