John Mellencamp ha pasado décadas perfeccionando su reputación como uno de los personajes más intransigentes del rock clásico, uno que no tiene miedo de convertirse en un verdadero cascarrabias cuando sea necesario. Mostró ambas cualidades durante su concierto del pasado 25 de mayo en Cleveland, Estados Unidos, advirtiendo a los asistentes que acortaría la presentación si no “se callaban”.
Según Cleveland Scene, el lugar colocó carteles en su vestíbulo que advertían: “Este espectáculo respeta la etiqueta del teatro”. Después del montaje de la película clásica de 30 minutos que abrió el espectáculo, Mellencamp dejó saber desde el principio de su presentación que “no me gusta que la gente grite desde la p*** audiencia”.
Sin embargo, eso no impidió que un poseedor de un boleto le gritara a Mellencamp que “tocara la maldita música” después de que, según los informes, fue entonces cuando se quitaron los guantes.
“Escuchen, si esta gente no se calla la boca, me voy a ir, ¿de acuerdo?” Mellencamp le dijo a la audiencia. “Porque no estoy acostumbrado a esta m****a. Miren, muchachos, si quisiera tocar en este tipo de ambiente borracho, tocaría afuera o en un estadio”.
Mellencamp inició la gira Live and in Person a principios de febrero. La caminata de 76 fechas está programada para concluir el 24 de junio en South Bend, Indiana. Lanzará su álbum número 25, Orpheus Descending, el 2 de junio.